domingo, 17 de abril de 2016

LA TRANSFORMACIÓN NUSEFISTA

La convivencia es un proceso importante por el cual los estudiantes pasan a lo largo de su etapa estudiantil, creando en ellos la tolerancia y el respeto hacia los demás. En la Institución se refleja esto no sólo en el aula de clases con los compañeros, sino también en los descansos, en el baño, los pasillos, el auditorio y cuando se realiza una formación. Pero ¿Qué cambios se han notado en la convivencia de los nusefistas?

Es importante recordar que este año la Institución inició con resacas del año pasado y por consiguiente hubo cambios, para algunos buenos y para otros no tanto, el caso es que todos hemos tenido que asimilarlos desde el personal administrativo hasta los estudiantes y aquí es donde se encuentra la convivencia que aunque no muchos la hayan notado, ha sido importante en este proceso.

Si se retrocede un poco para analizar los sucesos que ocurrieron a lo largo del primer periodo, hay que hacer memoria de qué factores marcaron la convivencia de los nusefistas, desde enfrentarnos a situaciones que desconocíamos y que fueron poco agradables para la mayoría, como las pérdidas de personas consideradas importantes en la Institución. Esto dejó una gran nostalgia, pero fue el inicio de una nueva etapa para nosotros donde los cambios empezaron a tomar forma y todos los nusefistas se unieron para recibirlos con gratitud.

Poco a poco la alegría fue brotando en cada rincón de la Institución, pero esta no llegó sola, vino acompañada de personas que se esfuerzan día a día para que la Institución siga mejorando: la comunidad educativa, personas que están dispuestas a escuchar nuestras voces y a fomentar la escucha en los demás, trayendo consigo no sólo energía positiva, sino también el orden que tanta falta hacía, logrando concientizar a los nusefistas volviéndolos más tolerantes y respetuosos con lo demás.

Aún faltan muchas cosas por mejorar, pero qué bonito es ahora sentirse a gusto en una formación, en un descanso, cuando nos reunimos en el auditorio y sentir que la tristeza que teníamos nos unió dando como resultado que la mentalidad individualista que se tenía ignorando lo que pasaba en la Institución, se trasformara en una mentalidad de equipo, donde la convivencia es el soporte que nos está ayudando a corregir los antiguos errores, y ahora que se ha terminado el primer período, estemos orgullosos por la gran Institución que somos.

 DANNA MARIAH CÁRDENAS


DETERMINACIÓN

El día sábado 16 de abril del presente año se realizará la entrega de informes académicos, donde se socializarán las problemáticas del grupo así como los niveles de mortandad estudiantil con el fin de crear planes para mejorar el rendimiento durante el siguiente período de clases, sin embargo, hay un aspecto que no se toma mucho en cuenta a la hora de estas entregas y es el estado emocional de los educandos.

Desde que iniciamos el camino del saber en los grados de transición se nos inculca una idea que, como buenos niños, absorbemos cual esponja, y esa es: “los más inteligentes tienen las mejores notas, los tontos las peores”, esto es verídico hasta cierto punto, pues, si bien muchos de los alumnos más aplicados son listos, hay a su vez muchos otros menos aplicados que son más inteligentes.
Solemos cometer el error de relacionar buenas notas con inteligencia, olvidando que esta última se divide en muchos tipos diferentes, dando casos como el pésimo alumno de matemáticas que es un genio musical, o aquel que sufre con compuestos químicos pero pinta con la pasión de cada átomo en su cuerpo.

Durante la entrega de reportes académicos, muchos jóvenes se sienten estresados respecto de su desempeño, esto se da porque sus padres quieren siempre que sus hijos sean los “mejores”, aquellos con las notas más altas porque “la apariencia esta antes de todo”, sin embargo, quienes no logran cumplir las expectativas, tienen que lidiar con el sentimiento de frustración  para con sus padres y la preocupación por recuperar los logros perdidos, esta carga emocional en algunos casos es la causa de que los estudiantes entren en un círculo vicioso, pierden y se sienten mal por ello, ese sentimiento los hace rendir menos, pierden otra vez repitiendo el ciclo nuevamente. En mi opinión, lo mejor que pueden hacer esas personas es no dejarse llevar por los comentarios y prejuicios de los demás, deben buscar la determinación dentro de ellos, levantarse, y con la frente en alto esforzarse por superar sus dificultades.

En esta vida se nos presentan muchos retos, y no siempre tendremos el ánimo o el medio para afrontarlos, pero no debemos retroceder, siempre hay que apuntar hacia adelante, no importa que tan grande sea la adversidad o que tan lejano se vea el sueño cumplido, nuestra dedicación disciplina y pasión son las cosas que nos llevarán tan lejos como queramos. Nunca olviden que la montaña más grande empezó siendo solo una piedra.

KEVIN MANRIQUE MOSQUERA